¡MUY FELIZ AÑO!
Primera quincena del año y todos muy entusiasmados comenzamos muy bien el año con ganas de trabajar, cambiar algunas cosas, y en pocas palabras, hacerlo mejor que el año pasado!
¡LES DESEO LO MEJOR A TODOS!
Gracias a Dios, se ha vuelto una costumbre hacer una rápida revisión del año que recién terminó y automaticamente pensamos en varias cosas que queremos mejorar y logros que queremos alcanzar. Pero les propongo que este año estos propósitos no se queden solo en eso, propósitos. Convirtámoslos en hechos.
Hoy recibí este mensaje, se los comparto para que reflexionemos en ello:
"Para alcanzar algo que nunca has tenido, tendrás que hacer algo que nunca hiciste". Cuando Dios te quita aquello que tenías agarrado, El no está castigándote, sino simplemente abriendo tus manos para recibir algo mejor. Concéntrate en esta frase... "La Voluntad de Dios no te llevará donde la Gracia de Dios no te proteja".
Para convertir en hechos nuestros propósitos vamos a tener que trabajar en ello, de lo contrario el primer día de febrero los habremos olvidado por completo, o habremos tirado la toalla acomodándonos a nuestra rutinaria vida. Lo cierto es que cuando lleguemos al 1º de enero del 2011, nuestra vida habrá cambiado y de nosotros depende que nos gusten los cambios.
Así que ¡ánimo y a perseverar en todos esos buenos deseos!
¡LES DESEO LO MEJOR A TODOS!
Gracias a Dios, se ha vuelto una costumbre hacer una rápida revisión del año que recién terminó y automaticamente pensamos en varias cosas que queremos mejorar y logros que queremos alcanzar. Pero les propongo que este año estos propósitos no se queden solo en eso, propósitos. Convirtámoslos en hechos.
Hoy recibí este mensaje, se los comparto para que reflexionemos en ello:
"Para alcanzar algo que nunca has tenido, tendrás que hacer algo que nunca hiciste". Cuando Dios te quita aquello que tenías agarrado, El no está castigándote, sino simplemente abriendo tus manos para recibir algo mejor. Concéntrate en esta frase... "La Voluntad de Dios no te llevará donde la Gracia de Dios no te proteja".
Para convertir en hechos nuestros propósitos vamos a tener que trabajar en ello, de lo contrario el primer día de febrero los habremos olvidado por completo, o habremos tirado la toalla acomodándonos a nuestra rutinaria vida. Lo cierto es que cuando lleguemos al 1º de enero del 2011, nuestra vida habrá cambiado y de nosotros depende que nos gusten los cambios.
Así que ¡ánimo y a perseverar en todos esos buenos deseos!
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